6 meses de nada en el Poder Legislativo.



El día de hoy, se cumplen 6 meses de que las y los Diputados de la 63 Legislatura tomaron posesión de los curules en el H. Congreso del Estado.

Es preciso voltear a ver en que están trabajando, que están haciendo por nuestro Estado y si están cumpliendo con la labor que juraron realizar al momento de la protesta.


Medir la productividad legislativa es sumamente complejo para los analistas, ya que la labor de los Diputados no solo se refleja en el número de Iniciativas que presenta, sino que también suma las participaciones en tribuna, los debates a los que se enfrenta sobre distintos temas, la gestión, las reuniones de comisiones y las votaciones al momento de decidir aprobar o no una Ley.

Sin embargo, en términos generales, ésta 63 Legislatura ha dado de que hablar, ya sea porque los medios de comunicación encargados de generar la noticia han buscado la nota o porque algunos de los legisladores han cometido pifias que los exponen al ridículo. 


Lamentablemente a 6 meses de que asumieron el rol, poco se puede hablar de acciones contundentes, de aprobaciones de leyes que mejoren las condiciones de los Sinaloenses o que garantices los derechos mínimos indispensables para vivir con igualdad.


Hace 5 meses escribí sobre como vivían atrapados en el 01 de Julio, hablando de una transformación que dicen va a llegar por parte de quien es grupo mayoritario. Y hasta la fecha, solo podemos decir que ya pasó medio año y la transformación  ni siquiera se ha asomado a la esquina.


Todavía no conocen el significado de ser un buen Diputado y lastimosamente los que si conocen de la labor parlamentaria no han podido cristalizar sus propuestas por la polarización que impide se transite en temas que realmente urgen en el Estado.
La carencia de oficio político, está dejando hasta la fecha un mal sabor de boca de esta legislatura y el poder ha seducido a más de uno que no se le puede ni voltear a ver, aquellos que pregonaban la transparencia y la rendición de cuentas, hoy maquillan sus facturas y guardan sus redes sociales para la crítica.

A pesar de todo esto, entre este hola de desilusión y desesperanza por quien votaron por un cambio. Existe todavía oportunidad.

Los años en el Congreso del Estado y las Diputaciones pasan volando, cada día como parlamentario es una oportunidad para redireccionar las acciones y hacer política, construir si es que más de uno desea continuar con sus proyectos a futuro.

Es preciso detenerse a 6 meses y replantear, ¿son realmente lo que dijeron que serían? O hay que tomar por asalto a la costumbre del día a día y los reflectores y ahora sí, de una vez por todas; ser la Esperanza de México.

Nos vemos en la próxima.


Twitter: @MiguelVicenteR

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