"A título personal"

Desde que comencé a escribir este blog, he recibido peticiones por así decirlo para escribir sobre algunos temas, unos me han parecido de poco interés como para compartirselos, pero hay algunos otros como el que me sugirió mi amigo Jonathan Arana por el que realmente vale la pena correr el lápiz, incluso hasta un libro se podría escribir contando las historias por las que pasan las personas que han transitado por esta situación. Les hablo sobre la autoestima para hacer política partidista , la fuerza de voluntad que hace ponerse de pie a todos aquellos hombres, jóvenes y valientes mujeres que se levantan día a día para dedicarse a ésta noble profesión. Pero para hacer política de la buena, la que soluciona y da esperanza, no la que difama, miente y simula. ¿Qué es la autoestima? es una conducta, una actitud que han desarrollado aquellas personas que se encuentran confiadas en lo que tienen, en lo que saben que pueden hacer, o bien lo que creen que merecen; éste último prec

En la clase política existe un respeto absoluto por quienes dan excelentes discursos, por quienes han pulido ésta herramienta y son un espectáculo al momento de disertar en eventos o reuniones. A pesar de ser una caracteristica de todo buen político o política, ésta no la podemos encontrar en la gran mayoría de las personas que se dedican a ésta actividad, las variables para dedicarte a esta profesión radican en el porque algunos son expertos en la función pública, otros en la administración, la gestión, la operación, o simplemente tener buenas relaciones ya es suficiente para transitar. Sin embargo; es inevitable pensar que estas cualidades lo exhimen de la obligación de saber comunicar políticamente lo que están realizando. Hasta hace algunos años, existía una línea y una sola forma de la correcta disertación de lo político: "Mexicanos, el día de hoy nos encontramos", "Con el permiso de las personalidades" , "Transitemos por la ruta de la democ

En la mente de un narcisista todo es él, todo gira alrededor de su persona, su belleza, su fama, sus redes sociales, su éxito. En el mundo; existen niveles de trastorno narcisista, pero en esta ocasión solo hablaremos del NARCISISMO POLÍTICO , un innombrable enemigo con el que conviven muchas y muchos políticos, que infelizmente afecta no solo a ellos; sino con quienes conviven día a día. Desgraciadamente; la clase política promedio tienen una dosis de narcisismo mucho superior al de la gente promedio. De ahí, su necesidad justificada de proyectar una imagen a veces alejada a la realidad y de las fortunas gastadas en publicidad; misma que no nos acerca ni poquito a la verdad de la persona, sino que más bien nos induce a una decisión electoral que nada tiene que ver con ejes o propuestas concretas de políticas públicas, más bien sirve para alimentar con una dosis de adrenalina narcisista al político o candidato proyectado en los grandiosos espectaculares, de ahí la reflex

E n este momento del proceso electoral;  los equipos de campaña ya se encuentran integrados; a nivel nacional como local los candidatos y candidatas seguramente están definiendo la estrategia que los habrá de llevar al triunfo este 1 de Julio.  Ya habrán hecho un check-list del utilitario, de los equipos humanos y de su target electoral ; algunos se inclinarán por las juventudes, otras u otros por las mujeres, por el campo, la transparencia, las comunidades LGTB... y así sucesivamente cada quien en función de su distrito, circunscripción o estado elegirá su eslogan y "bandera política", su lema, su hashtag, su frase; su grito de guerra. Sin embargo, hoy quiero hablarte de un sector peculiar, uno desconocido para todos. ¡Sí! desconocido pues aunque el "coordinador de campaña" haya dirigido "n" campañas, usted haya sido candidato "n" veces, nunca se ha enfrentado al voto de este sector, es decir no existe un patrón que ayude a entender por que