Fanáticos vs Ciegos





Comencé a interesarme en la política cuando leí a Maquiavelo,  supe de este personaje estudiando a Don Porfirio Díaz, gran político que estuvo adoctrinado por las influencias de Nicolás, después descubrí a Reyes Heroles y en su discurso encontré en cada mensaje la esencia del autor de "El príncipe".

Fue Reyes Heroles quien me motivó a participar en Política, la verdad es que Luis Donaldo Colosio siempre me pareció un personaje con mucha inteligencia y habilidad política, pero disfrazada de buenas intenciones. Algo así como Andrés Manuel pero este en el PRI, que por cierto cuando el Peje era priísta se dice que eran buenos amigos, incluso dos días antes de su muerte y de su gira rumbo a Tijuana, se reunieron para charlar sobre los retos de la búsqueda de la Presidencia, desde entonces quizás a Andrés Manuel ya le interesaba la silla presidencial, pero el turno en esa ocasión era de Colosio.

Las personalidades quienes mencioné anteriormente, eran idealistas políticos, si algo tienen en común, es que han tenido en su cabeza, "la idea de cambio" cambio para reformar el poder, para reformar la política, el Estado, las instituciones, la forma de hacer.

Con ello, su discurso va enfocado en una idea principal; la idea de que se necesita cambiar lo establecido, no mejorarlo, no empoderarlo, no incentivarlo, cambiarlo de facto.

Para esto, se necesita una mecánica persuasiva, convencer al elector que ellos representan la bondad, lo bueno, saben que "los hombres se conducen principalmente por dos impulsos; o por amor o por miedo" tal como lo dijo Maquiavelo, y en ese tenor generan expectativa, o esperanza; "una esperanza para México"

Y esta habilidad para disertar, hace que exista convencidos y no convencidos, lo cual lleva a una polaridad total, porque no da lugar a las posiciones neutrales sino que convierte el escenario en un debate estéril entre fanáticos y ciegos.

Fanáticos; quien están convencidos de que el mesías ha llegado, de que "ahora si" las cosas van a cambiar, que todo se va a transformar, que existe un mundo diferente, quienes no están interesados en preservar el status quo sino que quieren derrocarlo.

Ciegos; quienes no creen en un mundo diferente, quien siguen pensando que las cosas no estaban tan peor, que la promesa de que en realidad un país puede cambiar de facto está muy por encima de las posibilidades reales, sino que hay que seguir transitando en lo establecido. Quiénes no tienen fe ni en las profecías ni en los profetas. A los que el status quo siempre los ha beneficiado.

Y no, el rival aquí no es solo el Status Quo, en México, existe una gran desigualdad, la distribución de las riquezas está tan marcada, que la clase media seguramente ya está pronta a desaparecer. Y no solamente existe desigualdad económica, también entre los géneros, y dentro de los géneros existen los subgéneros donde también hay desigualdad. Por ejemplo en el caso de las mujeres, existe una gran población de mujeres rurales que ni siquiera se les han reconocido todos sus derechos.

Esto conlleva a que en México crezca un escenario de odio y de indiferencia. Y esto amigos, en política se puede capitalizar, la inconformidad, es el combustible perfecto para detonar desestabilidad; el enemigo real de todo gobierno en turno; la desestabilidad.

Desestabilidad lleva al descrédito, el descrédito a la desconfianza, la desconfianza a la perdida de votos. Pero como en toda democracia, cuando alguien pierde otro tiene que ganar, y aquí es donde aparece Andrés Manuel López Obrador.

Todo esto, nos ha llevado a enfrascarnos en debates absurdos, los Pro-Amlo vs los Anti-Amlo, los que están de acuerdo con el aeropuerto vs los que no están de acuerdo, los que votaron por el PRIAN vs los que votaron por Andrés, los ricos vs los pobres, si la política fuera futbol; los que le van a Messi vs los que le van a CR7.

Fanáticos que jamás entenderán que su presidente no es todo poderoso, que un 80% de sus promesas de campaña nos las va a cumplir porque son a toda luz prácticamente imposibles y que seguramente no cumplirá muchas cosas más porque gobernar no es tarea fácil. Contra ciegos que se siguen equivocando y siguen haciendo lo mismo de siempre, creyendo que van a volver en 6 años, más preocupados por señalar al de enfrente que hacer un ejercicio de autoreflexión y autocrítica real.

La democracia de  3 pesos que tenemos donde gana el popular de la fiesta nos da para eso, tenemos al presidente por el cual 24 millones de mexicanos dieron su voto de fe, para bien o para mal. ¡Ya es el presidente! y tenemos que aceptarlo. Entender que así se vive la democracia y que algunas otras veces te favorecerá o te sepultará, es una tarea que tienen los grupos antagónicos, solo habrá que recordar que lo difícil nunca será llegar, sino mantenerse.

Lamentablemente, seguiremos viendo mas enfrentamientos en redes sociales, más choque de opiniones, eligiendo  gobernantes al calor de la emoción, legitimados por los votos por supuesto, fanatizándonos con lo que nuestros lideres opinan, satanizando los que opinen lo contrario. "Los hombres son tan simples y unidos a la necesidad, que siempre el que quiera engañar encontrará a alguien que le permita ser engañado".

El debate de blanco contra negro a nadie le beneficia y cada vez se convierte más en una lucha por saber quien tiene la razón, el fin no es desenmascarar al que se equivoca, es y siempre será buscar el bien común.

A nadie nos gusta que nos digan que no sabemos, pero hay temas que rebasan nuestra opinión, debemos ser responsables con lo que decimos, y el Gobierno en turno tener cuidado de no conducir con sus discursos y acciones a los fanáticos al descontento, ni a los ciegos a la desesperación.


"El que persigue al enemigo después de una vez haberlo derrotado, solamente logra convertirse de ganador, otra vez a perdedor." - Nicolás M.


El tiempo dará la razón.

Twitter: @miguelvicenter 

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